La UE va a por todas: los móviles deberán ser más sencillos de reparar
El verano no es buen momento para tu móvil: los consejos para que lo soporte bien
He instalado iOS 17 y estas son mis impresiones
Los motivos que te llevarán a comprar un teléfono Android
He probado el STELLAR X-5 y es un teléfono que llega donde otros no
Del iPhone 15 al Redmi 13C, la batalla de los smartphones en 2024
La Unión Europea ya ha redactado una ley que trata de poner firmes a los fabricantes de dispositivos móviles, además de los de vehículos eléctricos. Ha sentado las bases para que un dispositivos móviles sean más sencillos de reparar y de reciclar. Esta normativa entrará en vigor a partir de 2027. Estas son unas pinceladas sobre todo lo que puede variar a partir de ese momento.
Tu móvil, más simple de reparar
Como sabrás, ya es difícil encontrar algún smartphone que no tenga la batería extraíble. Esto supone un inconveniente, ya que cuando deseamos reemplazarla no podemos hacerlo por nosotros mismos a no ser que seamos unos manitas.
Por esa razón, la normativa aprobada por inmensa mayoría por los miembros de la Unión Europea, determina que los fabricantes deben ponerlo mucho más sencillo a la hora de poder cambiar la fuente interna de alimentación. Tenemos que echar la vista atrás hace ya más de una década para recordar lo sencillo que era cambiar la batería de un móvil. Ahora, es prácticamente una odisea para cualquiera.
Por otro lado, el organismo europeo también ha dado indicaciones sobre la necesidad de reciclar, tanto los dispositivos como las baterías, aumentando el porcentaje a medida que nos vayamos acercando a ese 2027. No solo hablamos de dispositivos móviles, sino también baterías de vehículos eléctricos como bicicletas o patinetes. Es una necesidad, ya que no siempre acaban en el lugar adecuado.
De la misma manera, la normativa pretende que se puedan aprovechar al máximo todos los metales incluidos en este tipo de dispositivos, como el litio, el cobalto o el níquel.
La reparabilidad de un móvil o de otro dispositivo es otro de los puntos clave, ya que los dispositivos que no pueden ser arreglados fácilmente acaban su vida útil mucho antes, lo que supone un aumento descomunal en el empleo de recursos en su fabricación y en la huella de carbono posterior.
Se nos ocurre, por ejemplo, cómo puede resolverse la estanqueidad al agua en un dispositivo móvil que tenga batería extraíble. Nuevos retos que hay que ir superando, pero que son inevitables dado el agotamiento de los recursos, sobre todo, en los países que todavía no tienen la adecuada vía de desarrollo.
Por eso, los equipos de diseño y desarrollo deberán ponerse a trabajar para poder cumplir con la normativa europea. Ya se sabe, esto será requisito indispensable si quieren vender sus productos en nuestro continente.
Empresas como Apple están haciendo un gran esfuerzo a la hora de poner en marcha iniciativas para poder aprovechar al máximo todos los componentes del iPhone. El robot Daisy es una realidad desde hace ya años, y verlos trabajar es una auténtica delicia. Igualmente, se plantea ser una empresa neutra en carbono en el año 2030.
En definitiva, los fabricantes deben conjugar el diseñar dispositivos aparatos que sean sencillos de reparar sin que esto afecte a la funcionalidad. Será condición indispensable para todos los fabricantes que quieran vender en Europa y es una tendencia que ya no tiene vuelta atrás.
Temas:
- Dispositivos Móviles